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viernes, 17 de agosto de 2012

PICOS DEL INFIERNO

Este año la salida a Pirineos va a ser a Panticosa, con intención de dos rutas fuertes, intentando el mayor número posible de 3000s de la zona, y un tercer día más ligero. Al final el tercer día se fue al garete. La lesión en la rodilla que tuve en la Covacha, me hizo decidirme por descansar un día más. Así que el jueves lo voy a dedicar a viajar con calma desde Bilbao, y reposar la tarde, para ver si la rodilla no se resiente.

Ya he estado con anterioridad dos veces aquí, así que estoy en terreno "conocido". La primera hace 5 años, realizando mi primer 3000, el Garmo Negro. Entonces aun no estaba tan hecho a la montaña, y me conformaba con rutas "normales" que al final acababa liando yo solo. entonces ya me llamaron poderosamente la atención esa larga cresta sobre una veta de roca blaquecina. Sin embargo, la literatura los ponía como difíciles (oscilando entre F+ y PD-), pero sobre todo la cresta tildad de peligrosa, me echaba un poco para atrás.

Con la experiencia de estos años me hacen decidirme. Tampoco parece tanto, y después de la decepción que tuve en la cresta de la Pala de Ip, me digo que tampoco puede ser mucho peor.

La segunda vez fue en el 2009, en travesía de Panticosa a Sallente, siguiendo el GR-11. No hicimos cima, pero pasamos bajo la otra vertiente de los Infiernos, menos llamativa, pero no por ello menos espectacular.

Este año después de barajar varias opciones, me hacen decantarme por esta. La planificación sencillita. No quiero ir cargado, y por lo tanto la base será el refugio casa de piedra. Ahora pienso que hubiese sido mejor un vivac en el collado Pondiellos. Pero bueno, esas aventuras quedan para mejor ocasión.

El jueves llegamos a la tarde al refugio. Cañitas, cena, pronto a la cama (tampoco es que haya mucho que hacer), y al día siguiente nos levantamos a las 6 y cuarto (me acompaña estas dos jornadas Andres). Antes de las 7 salgo del refugio a sacar unas fotos, idénticas a las del 2009, cuando estabamos haciendo la gr-11:


Garmo Negro y Argualas se despiertan con los primeros rayos de sol, cuando el valle aun no se ha despertado


El camino parte justo desde detrás del refugio. Es la gr-11, por lo que no tiene perdida. Seguir marcas rojas y blancas. Si hay dudas, seguir a algún montañero, que siempre nos encontraremos. Salimos antes de las 7 y media. Tenemos todo el día por delante. En estos momentos siempre me encuentro extrañamente feliz, sabiendo que tengo todo el día por delante para disfrutar:


El terrorífico complejo construido aquí en los años del "ladrillazo" y luego dejado a medias por la crisis. Claro, desmontarlo sería muchísimo más caro que dejarlo como está, y así estaremos hasta que vuelva a haber dinero, esperemos que entoces para desmontarlo como es debido, y no volver a tener delirios de grandeza:


El camino llega a un miradorcito:


Aunque el camino es duro, es de lo mejor que he recorrido. Pronto empieza el espectáculo de cascadas:


Y durante un rato nos acompañarán, rarentizando nuestra marcha, que es mucho mejor que sea por esta razón y no por otras:


El bueno de Andres me retrata con la cascada de fondo


Aunque como yo prefiero sacar el original sin "bicho":


En una media horita llegamos a este llano. Me acuerdo perfectamente de él:


Y después de superar la pared, sin problemas, miro atrás para recordar estos lugares en mi casa


Y las cascadas siguen (y eso pese a la sequía que empieza a ser preocupante)


En algunos momentos de la ascensión te quedas sin palabras (y no por el esfuerzo, al menos no únicamente):


Y más:


Y como donde hay agua, hay vida...



Salimos a otro prado. Ya queda poco:


Antes de las 9 llegamos al embalse de Bachimaña, con el nuevo refugio, recién estrenado este verano:


Embalse de Bahcimaña, con ese azul cobalto que me trae recuerdos del estany de Certascan:


Caminando sobre el embalse. El camino está perfectamente balizado, se ven las marcas rojas y blancas:


Hasta ahora hemos venido con dirección norte; ahora el camino gira claramente al oeste y aparece ante nosotros ese impresionate pico piramidal. Investigo un poco, y es el pico de Piedrafita. Difícil que me olvide de él (la otra vez que subí por aquí había niebla y por eso no lo ví).


Y a la izquierda aparecen los Infiernos:


Un último repecho nos separa del ibon azul inferior. El agua del mismo baja formando cascadas, unas veces al lado del camino, otras veces sobre él, cuando se cruza el torrente:


Ibon azul superior (9:40 de la mañana; 2:10 hrs de ruta):


Que mejor marco para una foto (de nuevo gracias a Andres)


10 minutos más y estamos en el ibon azul superior:


Panorámica desde el ibon superior, tratando de sacar ambos ibones:


Aquí se nos une Toño, montañero de Binefar, que ha venido solo. En principio su idea era subir al primer infierno, y luego ya vería. Nos acabó acompañando toda esta jornada y la siguiente.

Ahora el camino gana altura decididamente, buscando el cuello del infierno, que ya se intuye al fondo:


Pasamos junto a la pared norte de los infiernos. Destaca su marmolera, cuyo blanco se confunde con el hielo del exiguo glaciar:


10:40 (una hora desde el ibon azul inferior y 3:10 hrs de travesía). Llegamos al cuello del infierno. El gr11 continúa hacia el collado de Tebarray, y de allí en una frenética bajada hasta Respomuso (bien recuerdo esa bajada, pese al tiempo trascurrido).


Nos tomamos un largo descanso. Llevamos más de 3 horas y ahora empieza lo duro y complicado de verdad. Yo bajo al ibón para coger un segundo litro de agua, ya que por arriba no tendremos nada.

A las 11:00 nos ponemos en marcha por esa áspera pedrera. El sendero está balizado por hitos


A medida que subimos las vistas se van haciendo más increibles:


El ibón de Tebarray se hace muy pequeñito. Detrás el Balaitous, auténtico señor de estos parajes:


Aunque alguno le pretenda (y consiga) hacer sombra:


En un punto el camino se adentra en una zona muy rota. Unos chicos que van delante dudan. Yo voy el primero, y decido salir a la cresta. Es amplia, aunque a la derecha tiene un patio de padre y muy señor mío, pero más adelante, cuando se estrecha, me vuelvo al sendero sin complicaciones. Mis compañeros continúan por el camino:


Hasta que desembocamos en una especia de antecima, la cual no sé si está catalogada como cima o no. Aquí se empiezan a quedar algunos de los que nos anteceden. Otros van pasando con dudas. El camino de todas formas es evidente, hay que descender unos metros hacia la marmolera (quizás la parte más delicada), y luego ya progresar por camino bastante claro:


Aquí más cerca:


Mis compis en el fácil destrepe hacia la marmolera. Parece ser que sin llegar a culminar la antecima, se puede rodear por el norte, y sin necesidad de destrepar, llegar de forma mucho más sencilla.


De todas formas el destrepe no tiene nada. Aquí se ve la entrada al sendero que cruza la marmolera:


Hasta alcanzar esa especie de colladito donde comienza la trepada al Infierno Occidental, y desde donde damos vista al Garmo Negro:


Cuya trepada tenemos ahí mismo. Aquí se queda otro de los chicos que nos anteceden:


Trepando a la primera cima (I)



12:20 INFIERNO OCCIDENTAL (3073 mts). Una hora y 20 nos ha costado desde el cuello del Infierno. Recuerdo a un padre con su hijo, que para animarle le dijo que faltaban sólo 20 minutos, je, je. Me pregunto si llegarían.


Y ante nosotros la cresta de la marmolera. Sopla viento. Toño tenía dudas abajo, debido precisamente al viento. Cuando la ve, opina como yo. Esto se pasa andando sin más:


Aquí más cerca. Salvo un par de escalones, se pasa sin ningún problema. Además es bastante ancha, y no hay apenas sensación de patio:


Toño negociando el único paso que se puede considerar como algo delicado:


Andres saliendo de la Marmolera:


INFIERNO CENTRAL (3.082 MTS) 12:40, llevamos ya más de 5 horas de travesía:


El infierno oriental desde nuestra posición en el central:


Un corredor que caía hacia el glaciar de la cara norte:


Bajamos al collado y en fácil trepada alcanzamos la cima del INFIERNO ORIENTAL (3.076 MTS)


Desde la cima, el Vignemale, rey indiscutible de sus tierras, en cuanto acaban las del Balaitous:


Ibones azules, Gran Fatxa (que ganas le tengo):


Garmo Negro e ibon de Pondiellos:


Volvemos a bajar al collado entre el Central y el Oriental. Aquí una profunda canal parte la pared sur. Es una canal que es una vía de subida en condiciones invernales. En verano mejor acometerlo por la derecha, repito la derecha, según descendemos.


En el collado, antes de subir al Oriental, unos chicos nos dijeron con mucha seguridad, que era por la izquierda, que ellos lo habían hecho. De hecho había una especia de sendero que bajaba directo desde la cima, pero luego pude ver donde acababa:


Es decir, repito, bajada por la derecha de la canal (en sentido de bajada). Toño se nos ha acabado uniendo. A partir de aquí estamos solos. Todos los que nos han antecedido en la cresta, han vuelto por el mismo camino.

Otra opción a esta canal, pasa por continuar la cresta, me asomé, y al principio parece fácil, pero luego ya había leido que te encuentras con una grieta, en la que hay que destrepar con mucho patio (un III o algo así). Desde luego, sin material ni se me ocurre, así que esto lo tenía descartado.

La bajada por la cara sur, sin ser difícil, sí tiene varios puntos delicados. A mi me pareció más complicado que la propia ascensión (I+), con varios resaltes a destrepar, además en roca bastante mala, con el consiguiente riesgo.

Comenzando el descenso:


Destrepando:


Ya cerca de la salida:


Salida (o entrada si se va a subir) del corredor:


Una vez abajo, todo es más fácil, ya que tan solo hay que coger el camino a la derecha hacia el collado de Saretas. Aquí yo quiero continuar haciendo cimas, aunque ya son las dos de la tarde. El sendero de la izquierda me llevaría de forma fácil al Arnales (otro 3000), pero tendría que volver por el mismo camino, y me llevaría mucho. El otro pico es el pico de Pondiellos, no llega a 3000 mts, pero he leido que es un fantástico mirador de la zona. Mis compañeros dicen que por ellos es suficiente, pero que no me líe demasiado.

Así que toca decidirse, un 3000 más, o un 2900 (curiosamente no tengo ninguno), del que además he leido que tiene unas vistas inmejorables.... Al final me decido por el pico Pondiellos, que además tiene algo más de complicación (el Arnales si se sigue la cresta hacia el cuello Saretas sí que es bastante más difícil, pero esta opción ni la he contemplado).

Así que hacia allí vamos, hacía el cuello Saretas:


En el collado hay una pequeña balsa, donde recargamos agua. Mis compañeros cogen el camino hacia el collado Pondiellos, que rodea el pico por el oeste. Yo comienzo a subir por donde mejor veo hacia el pico de Pondiellos. La subida es fácil. El tramo final hay que hacer una pequeña trepada. Las vistas, como ya había leido fantásticas. Una panorámica como muestra desde PICO PONDIELLOS (2.917 MTS). 14:30 HRS.


Lo más fácil es volver por el mismo camino. Pero como no quiero retroceder, continúo por la cresta. Cuando se pone más difícil me bajo hacia la vertiente de los ibones (la de Panticosa es un cortado), y poco a poco, voy avanzando hacia el collado de Pondiellos donde mis compañeros me esperan.

Collado de Pondiellos, donde llego a las 3 de la tarde:


Aquí comienza el descenso hacia Panticosa:


Antes nos despedimos de los Infiernos:


Y aprovecho la anterior foto, para dibujar, más o menos, por donde discurre el sendero de la cara sur:


Sólo queda el descenso, hacia el hoyo de Panticosa:


Aquí se empeñaron en sacarme:


El camino bordea un promontorio por la izquierda. Si se va por la derecha te encajonas en un barranco (es más difícil, pero creo recordar que fue por aquí por donde bajé la primera vez). Este camino enlaza con la subida normal al Garmo Negro, que además haremos mañana.

A media bajada, sin comerlo ni beberlo, en un sitio que era camino sin más, me pego un buen trompazo. Quizás iba demasiado distraido, y no me fijé donde pisaba, pero fue un buen susto (por poco no me abro la cabeza) y me disloqué el minique de la mano izquierda (que llevaría entablillado de emergencia el resto del día, y también el día siguiente). No he dejado de pensar en este susto y el que tuve en la Covacha, también en una zona sencilla, sin más. Si cualquiera de ellas hubiese sido en una zona más comprometida, no sé que me hubiese podido pasar. A partir de entonces anduve con mucha más atención.

El sendero continúa atravesando primero la Mallata alta (zona de pastos), y luego más abajo, la Mallata Baja. Justo después de esta, entramos en el bosque, que nos deja ya en el complejo de Baños de Panticosa, a las 5 de la tarde, después de una travesía de 9 horas y media.

Antes una visita a la fuente de las Argualas:




Y ya puestos porqué no, a la cascada de las Argualas:




RESUMEN Y DIFICULTAD:

Excursión exigente físicamente, se recorren unos 16 kms linealmente, y se salva un desnivel acumulado de 1600 mts (con el Pico Pondiellos). Tardamos 9 horas y media, con descansos y paradas incluidos, pero fuimos bastante lentos en las zonas delicadas, pudiendo alguien más ágil o acostumbrado, reducir el tiempo. La travesía nos permite realizar una de las crestas más fáciles y conocidas del Pirineo, los Infiernos. Realizar la circular, descendiendo por la cara sur, nos da la oportunidad de subir el Pico Pondiellos un excelente mirador de los Infiernos y de toda la zona en general. La posibilidad de continuar hacia el Garmo Negro y toda la cresta del Argualas, no es descabellada. Incluso en el día (con muchas horas de luz). También es normal hacer un vivac en el collado de Pondiellos, retomando la travesía al día siguiente. Nosotros perdimos todo el desnivel para tener que recuperarlo al día siguiente. Sobre todo yo, que subiría al Garmo Negro, no por su normal, sino siguiendo la ascensión a la aguja de Pondiellos.

Las dificultades se concentran en el tramo entre el cuello del Infierno y el collado Pondiellos, siendo el resto un camino o sendero, con mayor o menor pendiente. La trepada a la antecima de los Infiernos es sendero, muy descompuesto, pero sendero al fin y al cabo. La zona de las marmoleras antes de la trepada al Infierno Occidental, no tiene dificultad, pero sí una gran exposición, pudiendo crear dificultades a personas no acostumbradas (de hecho algunos se quedaron y no continuaron). La trepada al Infierno Occidental no supera el primer grado, y tiene escasa exposición. La cresta no tiene dificultad, pero sí caidas a ambos lados, que se relativizan por la anchura de la cresta. Lo peor es el descenso por la cara sur. I+, incluso le daría un II- por lo roto y peligroso del terreno. Lo más difícil del día sin duda. Además es bastante larga. Por último, la subida al Pico de Pondiellos sin dificultad aunque no está marcada (o yo no lo vi), y el descenso directo por cresta hasta el cuello de Pondiellos I+ si se evitan los pasos más difíciles de la cresta. En todo caso salida para personas con cierta experiencia en este tipo de trepadas y terrenos.

Mapa del recorrido:


1 comentario:

  1. Qué majos somos que hasta se nos unen más montañeros para disfrutar de nuestra compañía... Un saludo a Toño!

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